¡Ojo en casa! Aprende a curar bien una herida sin salir corriendo al médico

Un pequeño descuido cocinando, un resbalón en el baño o una tarde de juegos pueden terminar en una herida que, si no se trata bien, podría complicarse. Aunque parezca mentira, 8 de cada 10 accidentes ocurren en casa, y los más afectados suelen ser los niños y los adultos mayores.

Ellos, que viven el hogar con intensidad —ya sea explorando cada rincón o con movimientos más limitados, están más expuestos a caídas, cortes o raspones. Por eso, saber cómo actuar ante una herida en casa no es un lujo, es una necesidad.

Ante todo, mantén la calma y actúa con rapidez, pero sin improvisar. Carol Serna, Clinical Lead de Essity Health & Medical Colombia, lo resume muy bien: “Las heridas en casa pueden parecer menores, pero tratarlas de forma incorrecta puede afectar directamente el proceso de curación”.

6 pasos sencillos para curar una herida correctamente

  1. Lávate bien las manos antes de tocar la herida. Suena básico, pero es clave para evitar infecciones.
  2. Aplica presión con una gasa estéril si hay sangrado. Evita servilletas o pañuelos sucios.
  3. Limpia solo con agua corriente. Nada de alcohol ni agua oxigenada; estos productos dañan la piel y retrasan la curación.
  4. Evalúa la herida. Si es profunda o compromete áreas delicadas (como la cara o articulaciones), busca atención médica.
  5. Cúbrela con un apósito de calidad. ¡No uses cualquier cinta! Un buen apósito protege sin irritar.
  6. Olvida los remedios caseros. Nada de café, pasta de dientes o antibióticos sin receta. Lo natural no siempre es lo mejor.

Curar bien una herida comienza por tener lo necesario a la mano. Y en eso, Leukoplast es un aliado confiable que lleva años cuidando la piel de los colombianos.

Su campaña “Cuidando cada vida, cada historia” promueve el acceso a un cuidado seguro desde casa. Sus productos combinan tecnología médica con practicidad para el día a día.

¿Qué deberías tener siempre en tu botiquín?

  • Leukomed® Sorbact: apósito que previene infecciones sin necesidad de antibióticos.
  • Leukoplast Kids: ideal para la piel delicada de los más pequeños, con diseños divertidos.
  • Leukoplast Fixomull: adhesivo flexible que evita lesiones cutáneas por el uso de cintas comunes.

Prevenir es curar (y curar bien es prevenir)

Una herida mal tratada puede generar infecciones, cicatrices o problemas mayores. En cambio, una herida bien cuidada sana más rápido, mejor y con menos complicaciones.

Así que ya lo sabes: no subestimes ese pequeño rasguño y prepárate con los productos adecuados. Porque cuidar una herida no es solo poner una curita… es cuidar la salud de quienes más amas.

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