La Fundación EPM sigue llevando agua potable a las comunidades educativas rurales de Antioquia a través del Concurso Más Agua, Más Sonrisas.
- El C.E.R. Tafetanes, sede Juan Francisco Duque, y el C.E.R. Minitas, del municipio de Granada (Antioquia), fueron dos de los ganadores del Concurso Más Agua, Más Sonrisas de la Fundación EPM. Ambos se beneficiarán con soluciones de potabilización que transformarán la vida de más de 30 niñas y niños, así como de 60 familias aledañas a estas instituciones educativas.
- En 2024, el programa Agua para la Educación, Educación para el Agua de la Fundación EPM ha entregado 28 soluciones de potabilización a instituciones educativas rurales, impactando de manera positiva a 3.926 estudiantes de 25 municipios en los departamentos de Antioquia, Bolívar, Córdoba, Cundinamarca, Norte de Santander, Santander y Sucre.
- Desde su creación en 2011, el programa ha instalado 871 soluciones, beneficiando a 100.316 personas, entre estudiantes y comunidades vecinas a las instituciones educativas. Estas soluciones han llegado a 162 municipios del país.
La Fundación EPM impulsa el bienestar de la niñez en Colombia a través del Concurso Más Agua, Más Sonrisas, una iniciativa que promueve el acceso al agua potable mediante acciones integrales que fortalecen las capacidades en los territorios.
Creado en 2016 como parte del programa Agua para la Educación, Educación para el Agua, este concurso busca motivar a las administraciones municipales a incluir en sus planes de desarrollo estrategias alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Su propósito es unir esfuerzos para llevar agua potable a instituciones educativas y comunidades que enfrentan mayores desafíos en el acceso a este recurso esencial.
El pasado 20 de noviembre se llevó a cabo la entrega oficial de soluciones de potabilización a dos de los ganadores de la edición 2024 del Concurso: el C.E.R. Tafetanes, sede Juan Francisco Duque, y el C.E.R. Minitas, ambos ubicados en el municipio de Granada, Antioquia. Estas soluciones beneficiarán directamente a más de 30 niñas y niños, así como a más de 60 familias de las comunidades vecinas, transformando su calidad de vida y garantizando un futuro más prometedor.
La directora ejecutiva de la Fundación EPM, Lina Victoria Hoyos, expresó:
“El agua transforma los territorios, lleva bienestar y progreso. Sobre todo, aporta a la calidad de vida y libera tiempo que, muchas veces, las mujeres y cuidadoras invierten en recolectar y transportar agua. Cuando llegamos a una institución educativa rural, impactamos a la comunidad educativa y a sus familias, que también se benefician con la solución de potabilización”.
La Fundación EPM ha optimizado las soluciones de potabilización con un diseño más compacto y de fácil mantenimiento, pensado para las comunidades beneficiarias. Esta innovadora alternativa utiliza materiales sostenibles como madera plástica reciclada para su estructura y membranas cerámicas en los filtros, lo que favorece una disposición ambientalmente responsable.
Además, el sistema está diseñado para adaptarse a cualquier condición climática, gracias a la flexibilidad de su estructura física y a su innovación en la filtración de agua, asegurando agua potable de calidad en cualquier entorno.