Desde 1992 el Instituto MI RÍO era el ente encargado del río Medellín, tanto en la parte ambiental como en su infraestructura, con un presupuesto de $ 20.000 mil millones de pesos, la entidad se encargaba de cuidarlo hasta el 2005; cuando la administración municipal de entonces dejó que se la llevara la corriente.

Hoy se siente el gran mal que le hicieron a tan excelente idea, recordemos que bajo la administración del exalcalde Omar Florez, junto con su equipo de trabajo, fueron los que crearon MI RIO. Craso error el que cometió la administración que los precedió al desaparecer tan magnifica idea, pues ahora se está viendo la urgente necesidad de revivirla, eso sí, dando crédito a sus creadores originales.

Desde que se canceló el instituto, el río quedó a la deriva, en manos de nadie, en total orfandad. Por eso a gritos clamamos que un ente independiente que lleve ese nombre, se eche al hombro a esta, la mayor corriente hídrica que está atravesando a la ciudad haciendo estragos.

Al río Medellín le hicieron un gran daño luego de desaparecer esta gran idea, se convirtió en un muerto viviente que cobra vida cada que llueve. El río desde el punto de vista físico, hídrico, ambiental, paisajístico y social, debe ser manejado por un ente autónomo que no sea manoseado por el gobernante de turno y que tenga un presupuesto independiente de cualquier partido político. 

Que dejen que este instituto que con urgencia se debe crear de nuevo, se dedique enteramente a la conservación y mantenimiento integral de la cuenca. Preocupa que con los actuales planes de ordenamiento territorial, se este animando a construir a las ladera del río. 

Que vuelva MI RÍO, porque por ahora todo lo que se hace, se lo lleva la corriente.

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