Cuatro consejos para adquirir buenos hábitos de estudio.

No a todas las personas se les facilita crear una rutina de estudios y concentrarse para desarrollar sus deberes. Así puede lograrlo.

Desarrollar un buen hábito de estudio genera libertad en el aprendizaje, fomenta el trabajo autónomo y con ello posibilita mejora de los factores asociados al aprendizaje: emociones, relaciones sociales, memoria, actividad física, atención y alimentación.  

Lo anterior, le permite a la persona desarrollar disciplina como estrategia para alcanzar metas a corto, mediano o largo plazo.

“La disciplina no debe ser entendida como un régimen autoritario donde un externo impone su deseo a partir de reglas y consecuencias condicionando el comportamiento del otro, sino que esta debe ser concebida como una búsqueda constante por el autogobierno de emociones, valores y acciones que permitan no desviar la meta”, explica Rennier Ligarreto, profesor de la Facultad de Educación de la Universidad Javeriana e investigador de “Innovación en educación con uso de tecnologías” del grupo Innovum education.

No obstante, no a todas las personas se les facilita crear una rutina de estudios y concentrarse para desarrollar sus deberes, razones por las que la frustración es un sentimiento común.

Teniendo en cuenta esto, el docente y experto entregó cuatro recomendaciones clave para las personas que quieren adquirir hábitos de estudio funcionales:

Prepare el espacio de estudio: disponer de un espacio físico para el ejercicio psíquico resulta indispensable, cotidianamente cargamos de significado los lugares que habitamos: el trabajo, el hogar, el parque, la calle o la escuela, suelen ser lugares para el intercambio social. El sitio de estudio no es ajeno a esta realidad social y simbólica, en la medida de sus posibilidades debe contar con un espacio exclusivo para estudiar, personalice el lugar con recursos didácticos que le permitan generar un escenario de significado propio de acuerdo a su meta.  

Más no es mejor: Largas jornadas de estudio no garantizan aprendizaje, el método Kaizen sugiere distribuir sesiones cortas de tiempo, pero repetidas a lo largo de la semana, de tal manera que permitan generar frecuencias de estudio habituales para la persona; también se sugiere distribuir objetivos específicos para cada sesión de forma tal que sea fácil valorar el progreso y motivación por sesión.  

Aléjese de las redes sociales: Para generar disciplina en el estudio, debe alejarse de las redes sociales digitales. Existe una lógica de mercadeo, la cual menciona que “cuando algo es gratis el producto eres tú”, por lo cual, hacer scroll, es un mecanismo que se usa para pasar muchas horas en una misma red o entrada. 

Aprender para enseñar: Aprender implica desarrollar procesos cognitivos de orden inferior y superior, para ello, en la práctica del estudio generamos acciones de recordar, comprender, aplicar, analizar, evaluar y crear. Esta última es la más importante para valorar los progresos que tienen las jornadas de estudio, entre mayor capacidad tenga de explicar a otros algo aprendido y ello genere diálogos colectivos de crecimiento, mayor efectividad tendrá el hábito de estudio.  

“Los hábitos de estudio enmarcan estrategias educativas con objetivos de aprendizaje claros, lo que implica previa acción, disposición física y psíquica para garantizar una motivación consistente al compromiso personal, la primera persona que debemos persuadir es a nosotros mismos”, concluyó el experto.

Por: RCN RADIO